Llevo varios días con un catarro DESCOMUNAL que no dejo de toser y toser y toser, ufff, pues aunque no me podía ni mover me fuí a la cocina e hice mi dulce que llevaba días con la idea en la cabeza para hacerla, unas BROWNKIES.
Las hice a mano, sin molde pensando que me híban a quedar mas bonitas, pero como llevaba levadura la masa cuando se fue horneando fue tomando la forma que le dió la gana a las galletas salieron un poco deformes.
Bueno pero riquísimas, pues la receta que elegí fue la de ALMA OBREGÓN la de sus BROWNKIES.
He cambiado algunos ingredientes pues el brownie no quería hacerlo con cacao negro pues ultimaménte me afecta al sistema nervioso y acabo tomando tila después de cada galleta, jeje.
Para las cookies:
- 90 gr de mantequilla a temperatura ambiente
- 120 gr de azúcar morena
- 1 huevo
- 1/2 cucharadita de levadura química
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- 135 gr de harina
- Un puñado de chips de chocolate.
Para los brownies:
- 90 gr de mantequilla, a temperatura ambiente.
- 80 gr de azúcar morena, (le eché menos azúcar pues usé chocolate con leche)
- 1 huevo
- 140 gr de harina
- 135 gr de chocolate con leche con avellanas enteras
- 1/2 cucharadita de levadura química
- Un puñado de chips de chocolate.
Para hacer la masa se hacen de igual forma las dos masas.
La del brownie cuando hayamos mezclado la mantequilla con el azúcar y el huevo incorporamos el chocolate con leche derretido, por ultimo la harina con la levadura química.
La de las cookies se bate la mantequilla con el azúcar, luego el huevo y por ultimo la harina con la levadura.
Las dos masas se meten en el frigorífico durante una hora para que se endurezca un poco la masa y podamos manejarla.
Hacemos dos bolitas pequeñas una de brownie y otra de cookie, las juntamos, un poco mas por la parte de abajo donde está el pico del corazón, las aplastamos un poco y ya tenemos el corazón.
Las horneamos unos 15 minutos a 180 grados.
Para un buen regalo de SAN VALENTÍN hice una mega BROWNKIES en forma de corazón.
La impaciencia por acabarlo decoré la galleta cuando estaba todavía caliente y la glasa se me movió, bueno me quedó muy rica, jeje.
Así quedó la GRAN BROWNKIES de corazón.
Espero que os haya gustado, ¡ Hasta la próxima receta!
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